POR SAM WATERSTONE | READ IN ENGLISH
Cada año, uno de cada cinco estadounidenses experimenta un trastorno de salud mental o del comportamiento. La búsqueda de servicios de salud mental ha tenido una connotación negativa, pero la percepción pública ha comenzado a cambiar en los últimos años. Más personas que nunca ahora comprenden que los problemas de salud mental no discriminan por edad, sexo, sexualidad, raza, cultura o situación económica, y finalmente están buscando el tratamiento que necesitan.
Los proveedores de servicios de salud del comportamiento en el condado de Santa Bárbara están luchando para mantenerse al día con el aumento de la demanda y están constantemente buscando profesionales de salud mental diversos y calificados. Los expertos en el campo piden un tratamiento más inclusivo e individualizado, argumentando que cuando hay vidas en juego, la única solución es brindar atención preventiva inmediata y efectiva.
En el condado de Santa Bárbara, este problema tiene un gran impacto en los muchos miembros de la comunidad de Latinx (es decir, “de origen o ascendencia latinoamericana, utilizados como una alternativa neutral o no binaria al latino o latina”) que necesitan un acceso equitativo a servicios de salud mental culturalmente inclusivas.
Los individuos de Latinx, muchos de los cuales se identifican como bilingües y biculturales, representan el 38 por ciento de la población en el Condado de Santa Bárbara. Los proveedores de servicios de salud conductual, como CALM, que se adjudicó un contrato en junio de 2018 para brindar servicios de salud mental al Distrito Escolar Unificado de Santa Bárbara (SBUSD, por sus siglas en inglés), sirven a una mayoría de clientes de Latinx; en 2018, el 70 por ciento de los clientes de CALM se identificaron como Latinx.
El condado de Santa Bárbara experimentó un tumultuoso 2018 que provocó desastres naturales, un cercano tiroteo y cambios drásticos en las políticas de inmigración, y los expertos locales en salud mental han notado un aumento significativo en la demanda de servicios de salud mental, especialmente entre los jóvenes y los miembros de la comunidad Latinx. En consecuencia, los proveedores de servicios están experimentando una demanda particularmente alta de profesionales bilingües y biculturales de salud mental.
“La necesidad de profesionales de salud mental bilingües y biculturales está en su punto más alto,” dice el Dr. George Ayoub, presidente interino del Programa de Maestría en Psicología Clínica (MACP, por sus siglas en inglés) en la Universidad de Antioch, Santa Barbara. “La necesidad es evidente en los distritos escolares, en las universidades y para cualquier persona conectada a la comunidad,” explicó.
Según el Dr. Ayoub, crear espacios culturalmente inclusivos para las personas Latinx es extremadamente importante, y la razón puede er bastante obvia: para que el tratamiento de salud mental sea exitoso, los clientes deben sentirse cómodos con su profesional. “Cuando alguien busca consejería, si se reúne con alguien que los entiende, es mucho más probable que regrese,” dijo el Dr. Ayoub. Cuando regresar puede significar salvar la vida de alguien, está claro que este tema debe ser priorizado.
En un esfuerzo por atender esta importante necesidad, el programa MACP de Antioch ofrece una concentración opcional de Salud Mental Latina que brinda a los estudiantes la educación y la experiencia práctica que necesitan para convertirse en profesionales de salud mental bilingües y biculturales calificados. El Dr. Ayoub está desarrollando asociaciones con instituciones educativas locales (incluidas SBUSD y Santa Barbara City College) con el objetivo de reclutar a más estudiantes locales que posean la “superpotencia” de ser biculturales y bilingües.
En la Fundación de Santa Bárbara, la diversidad y la inclusión son fundamentales para la misión de la organización.
“Queremos asegurarnos de que todas las comunidades, inclusive todas las personas a las que representamos y con quienes trabajamos, tengan acceso a servicios sociales efectivos que comprendan e incluya su idioma e identidad cultural,” dijo Guille Gil-Reynoso, Oficial de Participación Comunitaria en la Fundación de Santa Bárbara. “Estamos enfocados en crear caminos con propósito para mejorar vidas, y apoyar los servicios inclusivos de salud mental, lo cual es un aspecto crítico de esos esfuerzos.”
La Fundación, a través de su proceso de planificación estratégico de 18 meses, encontró que la salud mental es un tema de importancia en el Condado de Santa Bárbara. Un estudio de 2018 mostró que la tasa de depresión de Santa Bárbara era un 5 por ciento más alta que el promedio estatal y un 13 por ciento más alta que la cifra objetivo federal, que fue uno de los factores que influyo al desarrollo del Programa de Subvenciones para la Salud del Comportamiento. El objetivo de este nuevo Programa de Subvenciones es apoyar programas de salud mental efectivos que honren la diversidad al comprender las necesidades básicas de todos los residentes del Condado de Santa Bárbara.
Para obtener más información sobre el Programa de Subvenciones para la Salud del Comportamiento (así como los otros Programas de Subvenciones de la Fundación), visite la página web de Oportunidades de Subvenciones de La Fundación de Santa Bárbara.
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