POR KARA SHOEMAKER | READ IN ENGLISH
La violencia sexual es un problema generalizado que afecta a personas de todos los géneros y es una experiencia traumática que no se limita a ningún grupo demográfico o socioeconómico. Las investigaciones indican que una de cada tres mujeres y uno de cada cuatro hombres serán agredidos sexualmente en sus vidas. Al frente de los esfuerzos para poner fin a la violencia sexual en el Condado de Santa Bárbara se encuentra Unidos para Terminar con el Asalto Sexual (STESA, por sus siglas en ingles), anteriormente conocido como el Centro de Crisis de Violación de Santa Bárbara, que ha brindado servicios críticos a las sobrevivientes de asalto sexual y sus familias durante los últimos 45 años.
Si bien la misión ha permanecido igual desde el inicio, la agencia introdujo su nuevo nombre y logotipo en 2018 para reflejar mejor la diversidad de sobrevivientes que apoya y los servicios que ofrece. Un problema recurrente que llevó a la agencia a cambiar su nombre del Centro de Crisis de Violación de Santa Bárbara fue la idea errónea de que la organización solo prestaba servicios a las sobrevivientes de violación.
“A veces la gente llamaba y decía ‘No fui violada pero’ y luego describían que habían sido violadas sexualmente de alguna manera,” dijo Elsa Granados, quien se ha desempeñado como Directora Ejecutiva de STESA durante los últimos 22 años, y ha participado en el movimiento para poner fin a la violencia contra las mujeres y los niños durante más de 30 años. “La otra es que la gente también dijo ‘bueno, no estoy en crisis, esto no sucedió recientemente, esto sucedió hace dos o tres o diez años. ¿Es este el lugar adecuado para que yo venga?’ ¡Absolutamente este es el lugar correcto!”
Además, la cara étnica y ambigua del logotipo original generalmente era percibida como una mujer, y como resultado, los hombres y la comunidad transgénero se preguntaban si la agencia era un lugar para que reciban ayuda. Al renombrar y utilizar un lenguaje más enriquecedor e inclusivo, STESA espera que más sobrevivientes se sientan alentados a conectarse con la agencia.
“Con todo eso, sentimos que era hora de hacer un cambio. La comunidad ha sido muy acogedora con ese cambio.” Granados dijo:” Creo que logró lo que queríamos. Número uno, la gente dice que se siente mucho más inclusivo. Así que ahora, sin tener un hombre o una mujer en el logotipo, las personas de todas las identidades de género se sienten más cómodas para acceder a los servicios de la agencia.”
STESA sirve a todos los sobrevivientes, especialmente aquellos de poblaciones vulnerables en nuestra comunidad. La agencia tiene casi 100 voluntarios, la mitad de los cuales brindan servicios directos a los clientes. También es la única agencia en el sur del condado de Santa Bárbara que cumple con los mandatos estatales de certificar a voluntarios y personal como Consejeros de Agresión Sexual, según se define en el código penal de California.
Los programas de intervención de STESA incluyen respuesta en persona y una línea telefónica directa de 24 horas para ofrecer asesoramiento en caso de crisis, defensa y acompañamiento médico / legal y referencias a la comunidad. Los servicios se ofrecen en inglés y español, y están disponibles independientemente de la capacidad de pago. La agencia también presta servicios a los sobrevivientes de la trata de personas y violencia doméstica brindando servicios de apoyo y asesoramiento iniciales, y trabajando con agencias asociadas que brindan servicios legales a los sobrevivientes. STESA tiene como objetivo prevenir la violencia sexual mediante la promoción de la conciencia pública y la comprensión de la agresión sexual a través de programas de educación y prevención, eventos comunitarios y talleres de autodefensa.
STESA recibió una Subvención para Necesidades Básicas de la Fundación de Santa Bárbara en 2018, que ha utilizado para fortalecer sus programas de Intervención en Crisis y Consejería de Largo Plazo para aumentar y mejorar la salud conductual de los sobrevivientes.
“Los programas de intervención críticos y oportunos de STESA que son ofrecidos a las víctimas de agresión sexual se centran en un modelo de empoderamiento que se refleja en su nueva marca, que es más inclusiva y representa mejor su alcance de servicios y trabajo, al tiempo que atrae a más individuos y organizaciones para unirse a sus esfuerzos,” dijo Guille Gil-Reynoso, Oficial de Participación Comunitaria de la Fundación Santa Bárbara.
En los últimos años, STESA ha visto un nivel de conciencia sin precedentes a nivel local, estatal y nacional sobre el tema de la violencia sexual. Las noticias sobre casos de violación y acoso sexual de alto perfil en la industria del entretenimiento, la política y los medios de comunicación, junto con los movimientos #MeToo, #WeSaidEnough y #TimesUp, han atraído una atención amplia al tema. Mientras esta mayor conciencia y atención de los medios es alentadora y crea algunos cambios en la percepción pública y en la legislación, es importante tener en cuenta que todavía hay mucho trabajo por hacer para poner fin a la violencia sexual y la cultura de la violación.
Para obtener más información sobre STESA y cómo ayudan a nuestras comunidades a prosperar, visite sbstesa.org.